MUSICA Y EMOCIONES (PROYECTO DE INVESTIGACIÓN)




En esta entrada publico el planteamiento y el enlace al proyecto de investigación "Música y Emociones" que he coordinado con Pablo Blanco Sánchez, Samuel Blázquez Martín y Alba de la Fuente Montejo, alumnos y alumna de 2º de Bachillerato del IES "Arenas de San Pedro". Este proyecto  se ha realizado en el marco del programa "Estudiantes Investigadores" que desde hace 5 años dirijo en este centro educativo y ha sido finalista en la 6ª edición de los Premios de Investigación e Innovación en ESO, Bachillerato y FP organizados por la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León.


El sonido y la música siempre han estado ligados al ser humano y, por tanto, ligados a las emociones. Ya nuestros primeros antepasados empleaban los sonidos y la música como herramienta de supervivencia y de comunicación; crearon asociaciones que les permitían predecir situaciones de peligro y con las que desarrollaron habilidades sociales comunicándose con un lenguaje común. De hecho, y según explicó Darwin en “El origen de las especies”, los sonidos musicales pudieron haber sentado una de las bases para el desarrollo del lenguaje, y a la vista está que el ritmo y la cadencia de la oratoria tienen rasgos musicales.

Nuestra relación con la música llega hasta tal punto que ésta es capaz de alterar nuestro estado emocional. Nuestro cerebro ha ido evolucionando y a lo largo del proceso ha ido incluyendo a los sonidos como pieza fundamental con la que crear patrones junto a las emociones y así interpretar nuestro entorno.

Las emociones son las encargadas de convertir los sonidos que percibimos en algo comprensible. Sin ser conscientes asociamos los sonidos con las emociones. Esta asociación hace que entendamos las situaciones en las que estamos, permitiéndonos reaccionar de acuerdo con las mismas. Por ejemplo, podemos detectar la alegría o la tristeza en una persona solo con el sonido de su voz. Es decir, asociamos la tristeza a un tono de voz más bajo y grave de lo normal y lo opuesto con la alegría. Ocurre lo mismo con la música.

Estudios neurocientíficos demuestran que la música tiene la capacidad de cambiar estados de ánimo activando cada una de las estructuras emocionales del cerebro. Se han llevado a cabo experimentos en los que se ha modulado la actividad en prácticamente cualquier estructura emocional del cerebro gracias a las emociones estimuladas por la música. La música es capaz de despertar el núcleo de las estructuras cerebrales creadoras de nuestro universo emocional. De esto sabe mucho la Musicoterapia.

Al escuchar música se activan las áreas del cerebro que se encargan de la imitación y de la empatía. Son las zonas donde están las neuronas espejo las cuales actúan reflejando las acciones e intenciones de los otros como si fueran propias. De esta forma podemos sentir el dolor de los otros, su alegría, su tristeza, etc. y quizás sea por esto por lo que la música es capaz de alterar nuestras emociones y crear lazos sociales, porque nos permite compartir sentimientos.

Habitualmente empleamos las palabras para describir cómo nos sentimos, pero en muchas ocasiones el lenguaje verbal no es lo suficientemente eficaz para hacer que otras personas sepan exactamente qué estamos sintiendo.  Con la música es más fácil la descripción sensorial. Con ella es posible provocar o evocar sensaciones de manera que el receptor entienda perfectamente a qué emoción nos estamos refiriendo. Por ello la música resulta enormemente útil y tiene aplicaciones muy prácticas. (Por ejemplo, en el cine la música resalta emociones y funciona como una guía que ayuda al espectador a entender mejor la escena).

Algunos estudios han demostrado que la emoción provocada por una obra musical está en función de alguna característica de la propia obra musical, así los tempos rápidos y las tonalidades mayores provocan estados emocionales de activación y alegría, los tempos sincopados y disonantes inquietud y desasosiego y tempos lentos con tonalidades menores relajación o melancolía.

El modelo de Inteligencia Emocional de Salovey y Mayer (1990) plantea la existencia de cuatro conjuntos de habilidades que conforman esta inteligencia: percepción emocional, facilitación emocional, comprensión emocional y regulación emocional. Teniendo como referencia este modelo, hemos querido plantear un diseño de investigación que a la vez fuera una acción educativa con los estudiantes participantes la cual les pudiera hacer más conscientes y capaces para percibir sus emociones, facilitarlas, comprenderlas y regularlas a través de de algo tan sencillo, profundo y universal como es la música.

Con nuestro proyecto de investigación, además, pretendemos indagar sobre la manera en que la música puede facilitar distintos estados emocionales en las personas, qué tipo de música provoca unas u otras emociones, hasta qué punto la música afecta a nuestro organismo y de qué forma la música ser utilizada para modificar o regular nuestro estado emocional.



Comentarios

  1. Hola, me gusto mucho la visión que tienen de este proyecto, pero tengo una pregunta , en que página del libro "el origen de las especies" hace referencia a lo que mencionan de los sonidos

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    1. http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0123-59312013000100013

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